Novedades

Desde hace 46 años alrededor del mundo, se conmemora durante el mes de marzo la contribución histórica de las mujeres por el reconocimiento y ejercicio de sus derechos, así como de su continua lucha por lograr la igualdad de género y el fin de todos los tipos de violencia que ponen en riesgo la vida y la dignidad de las mujeres, niñas, adolescentes y diversidades.

A pesar de estos esfuerzos, nos encontramos aún muy lejos de alcanzar una paridad real en el acceso a derecho de hombres y mujeres. Según estimaciones de ONU Mujeres y la Oficina de Naciones Unidas para el Desarrollo (UNDESA) se estima que, al ritmo en el que avanzan las reducciones de las brechas de género, podrían restar aún 286 años hasta saldar dicha desigualdad.

Particularmente, en relación a las mujeres y niñas migrantes, la Declaración sobre los progresos del Foro de Examen de la Migración Internacional realizado en junio de 2022, estableció que las mujeres siguen experimentando condiciones de trabajo precarias, fraude salarial, explotación laboral, salarios reducidos, despidos discriminatorios, retención de prestaciones, licencia sin sueldo forzada y separación prolongada de sus familias.

Por otro lado, las restricciones a la movilidad generadas en los últimos años por la pandemia de COVID-19 profundizaron también la vulnerabilidad y los riesgos para las mujeres de ser víctimas de redes de tráfico ilícito de migrantes y trata de personas, los cuales constituyen una de las formas más extremas de violencia de género y representan una grave violación a los derechos humanos.

Por este motivo, se requiere un urgente y adecuado tratamiento con enfoque de género en la prevención, investigación y persecución de los delitos, y en especial, en la protección y asistencia a las sobrevivientes.

Varias de las expertas que han participado en las actividades de EUROFRONT en el último año así lo subrayan.

Enfoque de género para la seguridad migratoria en América Latina

Desde marzo del año 2020, el Programa EUROFRONT en articulación con los gobiernos de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Paraguay y Perú; lleva a cabo en América Latina acciones para fortalecer el desarrollo y la seguridad migratoria, especialmente bajo los enfoques transversales de derechos humanos e igualdad de género aplicados en las fronteras piloto del Programa: Aguas Blancas – Bermejo, Desaguadero, Rumichaca y la Triple Frontera.

Estas acciones específicas consisten en la implementación de mecanismos de gestión migratoria para facilitar la movilidad humana a través del fortalecimiento y la coordinación de los organismos públicos e introduciendo elementos avanzados de gestión integral de fronteras. Además, se llevan a cabo estudios diagnósticos para la prevención y respuesta a la trata de personas y el tráfico ilícito de migrantes.

EUROFRONT también promueve mecanismos de coordinación regional a través de protocolos, acuerdos y de la creación de una plataforma informativa a fin de que los Estados cuenten con información de calidad para la toma de decisiones en la lucha contra la trata de personas y el tráfico ilícito de migrantes; además del mejoramiento de equipos tecnológicos en los pasos fronterizos seleccionados.

Asimismo, el programa hace especial énfasis en la capacitación de los y las agentes a cargo de la prevención y respuesta a la trata y tráfico de personas y de la gestión de fronteras, asegurando la promoción y el respeto de los derechos de las mujeres, niñas, adolescentes y otras poblaciones potencialmente vulnerables.

Teniendo en cuenta que cada vez son más las mujeres que migran en busca de un futuro mejor, es importante que, además de un tratamiento y soporte adecuados en materia de seguridad fronteriza y migratoria, se garantice la atención y asistencia a las víctimas sin importar su lugar de origen, edad, situación económica o social, lengua, etnia o estatus migratorio.

Por ello, el Programa EUROFRONT reafirma su compromiso en seguir promoviendo los derechos y la protección de las mujeres y los grupos vulnerables, así como en impulsar su participación plena en la toma de decisiones y en el desarrollo de las políticas, procedimientos y prácticas que contribuyan a construir sociedades más seguras y respetuosas de los derechos de las mujeres.